El complejo fue originalmente concebido como un caravasar, un tipo de posada para los viajeros de la Ruta de la Seda.

Este impresionante complejo arquitectónico del siglo XVII se encuentra construido alrededor del estanque más grande de la ciudad, proporcionando un espectáculo visual impresionante. Su diseño y construcción reflejan la majestuosidad de la época, con detalles arquitectónicos intrincados y una rica historia que se remonta a varios siglos atrás.

El complejo fue originalmente concebido como un caravasar, un tipo de posada para los viajeros de la Ruta de la Seda. Sin embargo, debido a un error en la interpretación del decreto del gobernante de la época, se construyó como una madraza, una escuela islámica. Este error se convirtió en una bendición disfrazada, ya que el edificio se convirtió en uno de los centros de aprendizaje más importantes de la región.

El estanque, que se encuentra en el centro del complejo, es un elemento clave en su diseño. No sólo proporciona un punto focal visual, sino que también tiene un significado simbólico, representando la sabiduría y el conocimiento que se imparten en la madraza. El reflejo del edificio en el agua añade una dimensión adicional a la belleza del lugar.

El complejo también cuenta con una mezquita y una biblioteca, lo que refuerza su papel como centro de aprendizaje. Los visitantes pueden explorar las diversas salas de estudio, admirar los intrincados mosaicos y frescos que adornan las paredes y techos, y sumergirse en la atmósfera tranquila y contemplativa del lugar.