Famoso por su diseño único y su impresionante altura.

Ubicada en la antigua ciudad de Khiva, se encuentra una joya arquitectónica que ha sido reconocida como Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Este monumento es un testimonio de la rica historia y cultura de Asia Central, que se remonta desde el siglo X hasta el XIX.

El minarete, conocido como Kalta Minor, es famoso por su diseño único y su impresionante altura. Aunque nunca se completó, su base masiva y su decoración intrincada lo hacen destacar en el horizonte de la ciudad. La base del minarete está cubierta de azulejos de cerámica esmaltada en tonos de azul y verde, un estilo característico de la arquitectura islámica de la región.

La historia de Kalta Minor es tan fascinante como su apariencia. Se dice que fue encargado por el Khan de Khiva en el siglo XIX, con la intención de que fuera el minarete más alto del mundo. Sin embargo, la muerte del Khan interrumpió la construcción y el minarete permaneció inacabado.

Hoy en día, Kalta Minor sigue siendo un hito importante en la ciudad de Khiva y un recordatorio de la rica historia y cultura de Asia Central. A pesar de que nunca alcanzó la altura que se pretendía, su presencia imponente y su belleza arquitectónica lo han convertido en un tesoro valorado y protegido por la UNESCO.