Descubre la magia de una de las ciudades más bellas de Europa bajo la luz de la luna. Un recorrido a pie por el centro iluminado tras la cena.

La experiencia de explorar una de las metrópolis más encantadoras bajo el resplandor lunar es verdaderamente mágica. Este recorrido a pie se realiza después de la cena, cuando las luces de la ciudad se encienden, iluminando las calles y los edificios históricos, creando un ambiente misterioso y romántico.

El centro de la ciudad, con su arquitectura gótica y barroca, se transforma en un escenario de cuento de hadas bajo las luces nocturnas. Los monumentos y edificios históricos, como el famoso Castillo, la Catedral de San Vito y el Puente de Carlos, adquieren una belleza etérea y misteriosa en la oscuridad. Las calles adoquinadas y las plazas públicas, normalmente bulliciosas durante el día, se vuelven tranquilas y serenas, permitiendo a los visitantes apreciar la belleza y la historia de la ciudad a su propio ritmo.